viernes, 25 de mayo de 2012

Amor y dolor: Estrecha relación.


Al tiempo hay algunas cosas que vas aprendiendo, en el silencio descubrí que el dolor tiene un olor particular, que cuando te quieres y conoces, no lo suficiente, sino todo, lo percibes a kilómetros, sabes que se aproxima, de donde viene o si vives con el.

Entiendo que el dolor es parte de lo humano, que para poder amar y valorar hay que sufrir y arriesgarse. El amor duele. Pero, cuando no es amor el peligro que se corre es grande, no se trata de donde buscar, donde invertir y apostar nuestros mejores días, pero es precisamente en la búsqueda que aprendemos de nuestra capacidad de amar y luchar; el secreto está en poder diferenciar entre el amor que cuesta pero que vale o el amor que duele y no solo no vale, sino desgasta. 

Hay quien sufre eternamente y hay quien ama en la eternidad. No tengo dudas, el primero mata, el segundo es una opción de vida.  

El dolor con su olor, el amor con sus ganas.